Al frente de este prometedor proyecto se encuentran Belén Soler Valle, manager y co-fundadora, junto a su marido, Nicolás Burdisso, ex futbolista, quienes trabajan en conjunto con un talentoso equipo donde brillan el enólogo Bernardo Bossi Bonilla junto al ingeniero agrónomo Marcelo Canatella, dos importantes referentes en la escena vitivinícola mendocina. Hoy presentan un nuevo integrante, Potrero Reserva Pinot Noir 2020, pensando en expandirse e ir creciendo año tras año en cuanto a diferentes varietales de su finca.
“Este Pinot Noir es sin lugar a dudas un nuevo desafío para la bodega, siempre nos proponemos alcanzar nuevas metas, sumar nuevos varietales en el portfolio y continuar conociendo el terroir para poder seguir elaborando grandes vinos. En esta oportunidad nuestro deseo fue elaborar un auténtico Pinot Noir de Gualtallary y la verdad que el resultado final fue ese, lo que nos es muy gratificante. Es una de las cepas preferidas de Nico así que la apuesta fue mayor.” afirma Belén Soler Valle, manager y co fundadora.